Se salvó KTM. Les contamos quien metió la mano

La icónica marca austriaca KTM, el mayor fabricante de motocicletas en Europa por volumen de unidades, ha evitado la disolución gracias al apoyo estratégico de su aliado indio, Bajaj. En una decisión clave durante una reunión de accionistas celebrada en Austria en la madrugada (hora colombiana), se determinó que KTM seguirá adelante con un plan de reestructuración en lugar de enfrentar una liquidación que habría dejado a los accionistas con menos del 15% del valor de la compañía.

El primer paso hacia la recuperación lo ha dado Bajaj, que ha comprometido 50 millones de euros de un total de 150 millones que está dispuesto a invertir para rescatar a la marca naranja. Esta alianza no es nueva, ya que ambas compañías han colaborado en la producción de modelos como la Duke 200.

El plan de reestructuración para KTM

Pierer Mobility AG, propietario de KTM AG, confirmó que los acreedores han aceptado el plan de reestructuración presentado. Según el acuerdo, los acreedores recibirán un pago único del 30% de sus créditos en efectivo. Sin embargo, el camino hacia la estabilidad financiera no será fácil. KTM tiene hasta el 23 de mayo para pagar 600 millones de euros a sus proveedores, lo que representa casi el 30% de su deuda total, estimada en 2.000 millones de euros (aunque algunos medios sugieren que podría alcanzar los 3.000 millones).

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Además, la compañía necesita otros 150 millones de euros para reactivar la producción, ya que sus plantas llevan meses paralizadas debido al exceso de inventario sin vender.

La búsqueda de inversores: de los 20 posibles inversores iniciales, solo 7 han mostrado interés en participar en la reestructuración de KTM. Entre ellos, se rumorea que BMW podría estar considerando una alianza estratégica, viendo en KTM una oportunidad para fortalecer su posición en el mercado de las motocicletas. Sin embargo, ninguna de las dos compañías ha confirmado esta información.

El futuro en el MotoGP y el Dakar: aunque no se ha mencionado el futuro de KTM en eventos como el Rally Dakar, la marca ha expresado su intención de continuar compitiendo en MotoGP a largo plazo, aunque con un enfoque más reducido. La idea es mantener su presencia en la categoría reina hasta 2027, cuando se espera que las motos pasen a utilizar motores de 850 cc.

Los detalles que se conocen

Este escenario también podría abrir la puerta para que BMW ingrese al MotoGP, una categoría en la que aún no compite, a pesar de su liderazgo en el Mundial de Superbikes (SBK) en el 2024. Con su capacidad financiera y experiencia en ingeniería, BMW podría ver en KTM una oportunidad para consolidarse en la élite del motociclismo mundial.

En resumen, el apoyo de Bajaj ha dado a KTM una segunda oportunidad, pero el camino hacia la recuperación será desafiante. La marca naranja deberá demostrar que puede recuperar su antiguo esplendor mientras navega por un panorama financiero complejo y busca aliados estratégicos para asegurar su futuro.